En 1620 los primero colonos británicos llegaron a América a bordo del navío Mayflower. Hacía el siglo XVIII habían ya aproximadamente 13 mil colonos, cuyas relaciones con el pueblo norteamericano se hacían cada vez más tensas. El principal tema de fricción eran los impuestos que tenían que pagar los colonizados. Además los americanos se quejaban de que no tenían representación en el Parlamento Británico.
El 16 de diciembre de 1773, los colonos arrojaron al mar en el puerto de Boston un cargamento de té transportado por barcos ingleses (el motín del té). Así comenzaron las hostilidades.
Tras años de guerra, en 1776 los americanos se declararon independientes e Inglaterra reconoció su independencia en la paz de Versalles, en 1783.
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